Black Friday: ¿ahorro o estafa?
El Black Friday, como cada año, abre la gran pregunta de si es una estafa o realmente ahorras. Muchos consumidores esperan ansiosos esta fecha para aprovechar los “grandes” descuentos que ofrecen la mayoría de los comercios y adelantar compras navideñas o productos de alta gama.
Sin embargo, muchas de estas marcas aprovechan esta fecha para impactar con publicidad y descuentos para obtener mayor alcance de ventas, que terminan resultando falsos descuentos. En este sentido, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) lleva realizando estudios desde 2015, tomando de referencia más de 18 mil precios diferentes.
En esos estudios, demuestran que el 99% de las rebajas por el Black Friday no son reales: esas “rebajas” o “descuentos” del precio final en los productos en realidad esconden una subida media del 3% en precio final de los productos.
Esto ocurre porque los descuentos no se aplican sobre los precios más bajos, que como bien establece el artículo 20 de la Ley 7/1996, de 15 de enero, de Ordenación del Comercio Minorista, cuando las marcas decidan realizar ofertas, rebajas o promociones, deben usar como precio de referencia el más barato de los últimos 30 días.
Para más inri, son numerosas las denuncias que llegan a la OCU sobre una práctica común en los comercios: se colocan varias etiquetas a la vez sin que el consumidor vea desde qué precio parte el descuento, cuyo acto dificulta medir cuál es el ahorro real sobre el precio del producto.
¿Qué otros tipos de estafa son comunes en el Black Friday?
Los comercios no son los únicos que aprovechan este día para recaudar dinero, ya que las compras online realizadas por los consumidores en estas fechas también suponen una oportunidad para realizar estafas online para los ciber delincuentes y los ciber estafadores, comúnmente conocidas como phishing.
Puesta que la mayoría de las compras durante estas fechas se realizan vía Internet, los ciber delincuentes aprovechan para robar información personal de los usuarios, los datos bancarios, y otros datos donde puedan intentar suplantar su identidad, o bien para ofertar artículos llamativos que no existen o incluso redirigir a páginas fraudulentas.
Por tanto, entre las formas más comunes de estafa, fraude y robo online que realizan estos ciber delincuentes encontramos:
- Typosquatting: los ciber delincuentes duplican las páginas webs, con nombres de URL muy parecidos, para engañar a los consumidores y hacerles creer que se han realizado las compras en páginas oficiales.
- Se realizan cobros indebidos en la tarjeta de crédito: interfieren para realizar cargos no autorizados en la tarjeta.
- QRishing: los estafadores manipulan los códigos QR para que los usuarios se descarguen un software malicioso por el que infectar el dispositivo y acceder a sus datos personales.
- Venta de productos falsificados: venden productos similares a los originales con descuentos llamativos.
- Productos no entregados: donde incluso se hacen pasar por las empresas de logística para derivar a los usuarios a páginas webs maliciosas y acceder a los datos bancarios mediante troyanos bancarios.
¿Cómo evitar este tipo de estafas?
Para evitar ser estafado recomendamos estar pendientes de los pequeños detalles a la hora de realizar las compras online, como, por ejemplo, identificar que el nombre en la URL se encuentra escrito de la misma manera que el nombre de la web original, revisar las promociones que llegan a lo emails y verificarlas con las páginas oficiales de las marcas, confirmar que la navegación es segura confirmando que la web empieza por “https”, o evitar conectarse a las redes WiFi abiertas y gratuitas, entre otros.
Asimismo, una de las maneras más eficaces para evitar que estos ciber delincuentes accedan a tus datos personales o bancarios es pagar a través de una pasarela de pago segura que actúe de intermediaria entre el Sitio Web y el usuario, donde se realicen pagos cifrados.
Por último, recomendamos comprobar que exista una comparación entre el precio original y el descuento de manera clara y transparente, y recalar que, aunque sean productos rebajados, estos deben tener la misma calidad y contar con la misma garantía que si se compraran fuera del periodo promocional.
En este mismo sentido, la OCU recomienda consultar comparadores y asesores de precios que hagan seguimiento continuo de los precios de venta para no caer en este tipo de trampas y no ser víctimas del engaño y del fraude.
En Letslaw nuestro equipo de abogados especialistas en Derecho Digital ofrece un asesoramiento personalizado en la materia, así que no dudes en contactar con nosotros.